viernes, 6 de septiembre de 2019

Game Loading Cap 93


Novela original por: Long Qi (龙柒)
Game Loading

Mundo Abierto (18)


Traducido por: Firu Firu

Esos ojos…
¿El profesor tenía unos ojos tan bellos? Estos colores eran realmente…
¡Eran realmente extravagantes!
Xie Xi bajó la cabeza y solo esperaba que el profesor no tuviera la enfermedad chuuni mientras enseñaba.
Afortunadamente, la clase era bastante normal y la disciplina en el aula era particularmente buena. Probablemente fue porque el encanto del profesor Jiang era demasiado grande. Las chicas que se reunían todos los días de semana para hablar sobre cosméticos y dramas coreanos o espectáculos de variedades ahora estaban sentadas y escuchando muy seriamente. Los chicos sentados atrás ni siquiera dormían o jugaban.
La calidad de la clase era particularmente buena, así que Xie Xi estaba de buen humor. No lo pasó mal a pesar del extravagante profesor Jiang.
Los estudiantes que originalmente salían del aula después de la clase ahora eran inusualmente estudiosos y comenzaron a hacer preguntas.
Este profesor Jiang no era una persona común y corriente. Al parecer había encontrado muchas tormentas. Una vez que se encontró con una pregunta estúpida planteada por una estudiante, sonrió, “Si no entiendes esta pregunta, te recomiendo no perder el tiempo y cambiar de carrera lo antes posible.”
La compañera de clase, “…”
Su única oración hizo que muchas estudiantes al menos hicieran preguntas reales.
Xie Xi tenía una pregunta que hacerle al profesor, pero el nuevo profesor era demasiado llamativo. Xie Xi no quería llamar la atención y lo dejó ir.
Era la hora del almuerzo una vez terminada esta clase. Xie Xi se dirigió primero a la biblioteca y esperó una hora antes de caminar a la cafetería.
Solo le quedaban 20 yuanes en su tarjeta de comida y el dinero por su trabajo no llegaría hasta el sábado. Tenía que comer cada vez menos en los próximos dos días para sobrevivir.
20 yuanes era una comida para los otros estudiantes, pero Xie Xi tenía que usar ese monto para dos días.
Si no desayunaba, tendría cuatro comidas. Solo podía usar cinco yuanes para una comida y esto no era suficiente para una chica normal.
Xie Xi tenía mucha hambre. Podía oler todo tipo de aromas cuando se acercaba a la cafetería y tragaba saliva.
¡Quería comer comida picante, tocino, jamón y carne! También quería fideos calientes y agridulces, panqueques con fruta… la tarta aceitosa también era agradable de ver, pero desafortunadamente, una tarta era cuatro yuanes y solo tenía el tamaño de una palma. Esto era demasiado ineficiente para comer.
El objetivo de Xie Xi era el arroz y las verduras en el centro de la cantina.
En comparación con la variedad de bocadillos, las comidas subsidiadas por la escuela eran las más accesibles. Podrían ser desagradables y ocasionalmente había olor a tomates y huevos, pero en general, ¡este era el más rentable!
Un plato que costaba dos yuanes también contenía arroz. Xie Xi sonrió mientras la señora le daba una cucharada extra. No sería ningún problema llenarse si él comiera este tanto.
Su comida fue comprada con tres yuanes ¡y el resto sería para el desayuno!
Xie Xi llegó tarde porque el pescado y la carne básicamente se terminaban en la primera hora. No había necesidad de hacer fila y Xie Xi podía comprar la comida vegetariana más barata sin escrúpulos.
Su vida era más dura, pero Xie Xi no estaba dispuesto a que los demás lo supieran. Quería terminar la universidad normalmente en lugar de convertirse en una existencia especial bajo la mirada de los demás.
Como de costumbre, hoy Xie Xi compró estofado de col con tofu, dos cucharadas de arroz por un total de dos y medio yuan.
Encontró el rincón más remoto y se sentó a comer. Las personas que tenían mucha hambre sentirían que todo era fragante, incluso si el arroz estuviera pegajoso y con grumos.
Xie Xi estaba comiendo seriamente cuando alguien se sentó frente a él.
Estaba un poco aturdido. Lo primero que vio fue un camarón dorado, una palometa plateada entera, un estofado de papa y res e incluso la sopa ¡era una olla pequeña de buena sopa de champiñones!
¡Xiao Xie nunca había visto una comida de cafetería tan buena en su vida! No pudo evitar levantar la vista y vio al hombre cuyos párpados estaban caídos.
Xie Xi dijo de inmediato, “Hola, profesor.”
¡Era el nuevo y extravagante profesor! Jiang Xie miró su plato y frunció el ceño ligeramente. “¿Por qué estás comiendo tan poco?”
Xie Xi apretó su agarre en los palillos y tuvo un ligero calambre.
Jiang Xie no estaba de acuerdo con esto. “Tu cuerpo está creciendo, así que no deberías pensar en perder peso.”
Xie Xi lo miró fijamente.
Jiang Xie empujó el pez palometa y los camarones hacia Xie Xi. “Estos jóvenes de hoy en día, su estética es realmente problemática. ¿Por qué quieres ser delgado? Un hombre debe ser fuerte.”
Xie Xi miró los camarones dorados y el pescado con un rico aroma y le dolía el estómago hambriento. Tragó saliva y dijo, “Profesor, usted coma. No me gusta comer estas cosas.”
Jiang Xie le dijo, “Los pescados y los camarones son ricos en proteínas. Comerlos no te hará engordar.” El malentendido hizo que Xie Xi se sintiera muy cómodo, pero no quería aceptarlo. Sacudió la cabeza y dijo, “Soy alérgico a los mariscos.”
“Está bien.” Jiang Xie empujó el estofado de papa con res y la sopa de champiñones. “Entonces come esto.”
Xie Xi no había comido carne durante mucho tiempo. Vio que era carne de verdad y vaciló. “Yo…”
Jiang Xie lo interrumpió. “Esto es tarea. Tienes que comer.”
Xie Xi no se movió. Si él comiera esta comida, la próxima comida sería aún más incómoda.
Inesperadamente, Jiang Xie se levantó y dijo, “Esas niñas me vieron otra vez. Me iré primero.”
Xie Xi dejó caer la boca abierta. “Profesor, su plato…”
Jiang Xie ya se había ido a un ritmo muy rápido.
La persona se había ido y el estofado de papas con carne, la sopa de champiñones, la palometa y los camarones lo miraron con pena.
La manzana de Adán de Xie Xi se movió hacia arriba y hacia abajo. Si él no comiera, entonces estos platos se desperdiciarían. Desperdiciar comida era una pena. Tampoco podía llevarlos y perseguir al profesor Jiang.
Seguramente…
Xie Xi levantó sus palillos y tocó la pulpa de res. La hermosa pulpa de res rebotó y de ella surgió un olor fragante. La salsa cubría las papas y todo lucía muy bien.
Se enfriaría si él no comiera y esto también era un desperdicio. Los palillos de Xie Xi estuvieron suspendidos por tres segundos antes de finalmente decidirse.
¡Comételo! No necesitaba comer, pero ya que estaba aquí, ¡comería! En cualquier caso, el profesor se había ido y era mejor satisfacer su estómago que a un bote de basura barato.
Xie Xi tomó un trozo de res y se lo comió de un bocado. El sabor de la carne lo hacía tan feliz como para morir.
¡Realmente sabroso! ¡Tan delicioso! Cuando el espíritu de Xie Xi volvió, ya había limpiado todo sobre la mesa. Incluso la sopa fue comida con el arroz.
A la edad de 18 años, era justo comer más. Xie Xi a menudo tenía hambre y rara vez tenía una comida tan satisfactoria. Sintió que no necesitaba comer por la noche y podía ahorrar tres yuanes. Si él fuera a trabajar, ¡no sería demasiado tarde para irse a casa con el autobús nocturno!
El corazón de Xie Xi era hermoso y su impresión de Jiang Xie cambió 360 grados. El profesor Jiang podría haber nacido extravagante, ¡pero este profesor todavía era bueno!
Por la tarde, un estudiante de último año de la escuela Sun Muqing encontró a Xie Xi. “Xiao Xie, ¿tienes tiempo últimamente?”
Sun Muqing era el nuevo recepcionista cuando Xie Xi entró a la escuela y cuidó mucho de Xie Xi. Estaba agradecido con este entusiasta hermano.
“Hermano, ¿qué es?”
Los ojos de Sun Muqing se iluminaron. “Recientemente he recibido un trabajo. ¡Si tienes tiempo para ayudar, te pagaré un sueldo!” Sabía que Xie Xi vivía solo y que no tenía mucho dinero. Esto no era diferente a una lluvia oportuna para Xie Xi. Él respondió rápidamente, “¡Bien!”
¡Tenía que ahorrar para pagar la matrícula del próximo semestre y estaba dispuesto a hacer 10 trabajos! Sun Muqing le dio una palmadita en el hombro. “Puedes estar tranquilo, no te trataré mal.”
Xie Xi le dijo, “Hermano, siempre me has cuidado bien. Estoy muy feliz de ayudarte.”
Hoy fue un día realmente afortunado. Xie Xi se sentó en el aula con el estómago lleno, completamente satisfecho.
Las clases de la tarde terminaron y Xie Xi cuestionó a Sun Muqing una vez que terminaron. Sun Muqing dijo que no había necesidad de apresurarse y le informaría a Xie Xi después de dos días. Xie Xi asintió y volvió a casa.
Él no vivía en el campus. La tarifa de alojamiento podría ser muy barata, pero Xie Xi no podía gastar el dinero. No le importaba perder media hora corriendo a casa.
¡Otras personas tenían que encontrar el tiempo para correr mientras este era el entrenamiento de Xie Xi! Él era el único en casa desde que su madre Xie Su se había mudado hace mucho tiempo. Estaba acostumbrado a vivir solo.
El viejo edificio estaba en mal estado y las condiciones sanitarias eran extremadamente pobres. Si hubiera tiempo, Xie Xi limpiaría el pasillo, despegaría los pequeños anuncios y haría lo que pudiera.
Sin embargo, había estado demasiado ocupado recientemente y no lo había limpiado durante mucho tiempo.
Xie Xi estaba sin aliento por la carrera. Miró la hora y vio que aún era temprano, además de que había comido lo suficiente al mediodía. Agarró una escoba y comenzó a barrer el pasillo.
No hubo tiempo para quitar los pequeños anuncios. Volvió a casa para agarrar sus lentes, se secó la cara y salió por la puerta.
Xie Xi estaba cubierto de sudor. Una vez que entró en el clima invernal, no pudo evitar temblar. Quería tomar una ducha, pero el calentador de agua en casa consumía demasiada energía y no podía soportarlo.
Se calentaría tan pronto como él corriera. ¡Se lavaría una vez que llegara!
Xie Xi respiró suavemente mientras corría hacia el Bar Humo Ligero. Este era un trabajo que había encontrado hace un mes, sirviendo como camarero en el bar.
Este trabajo era bastante adecuado para Xie Xi porque el período de tiempo era bueno. Era desde las 6 pm hasta la medianoche y no afectaría sus clases normales. El salario tampoco era malo. ¡Solo necesitaba esperar el pago de esta semana y sus gastos de vida no serían tan ajustados!
Xie Xi entró en el bar por la puerta de atrás y, un joven con el que trabajaba, Xiao Li le dijo, “Estás trabajando demasiado duro. Puedes tomar el autobús. Ya que tienes una identificación de estudiante, ¿no son solo unos pocos yuanes?”
Desafortunadamente, Xie Xi no tenía dinero para recargar su tarjeta de autobús.
Xie Xi respondió, “He estado ocupado recientemente. Espera la próxima semana y renovaré mi tarjeta de autobús.”
Xiao Li continuó, “También está bien sin una tarjeta de autobús. ¿No es sólo un yuan más?”
Xie Xi no dijo nada más sobre el tema. “Iré a cambiarme de ropa.”
“Ve y toma una ducha primero. Recuerda secarte el cabello.”
Xie Xi se dirigió al vestuario. Se sentía mucho más cómodo después de una ducha caliente. ¡Debe ser el almuerzo que le estaba dando mucha fuerza!
Se puso un traje pequeño y se echó hacia atrás el pelo que cubría sus ojos, revelando una frente suave.
Xiao Li se acercó y gritó, “Esta cara, en serio…” ¡La había visto tantas veces, pero aún era tan buena!
Xie Xi le sonrió. “También eres guapo.”
“Sólo me siento guapo cuando no estoy contigo. Una vez que vienes… cielos…”
A Xie Xi no le gustaba su cara. No le había traído nada bueno desde que era un niño.
“Vamos, es casi la hora.” Xie Xi lo distrajo. “Es hora de cambiar turnos con el hermano Chen.”
El bar tenía un estilo limpio y elegante con un buen ambiente. A trabajadores de élite les gustaba venir aquí para relajarse.
Xie Xi era particularmente discreto e invisible en la escuela. Era solo que trabajar aquí significaba que tenía que exponer toda su cara. En el momento en que exponía su rostro, siempre se metería en problemas.
Un hombre de mediana edad que estuvo viniendo aquí durante casi un mes ya había puesto sus ojos en Xie Xi. Xie Xi se sentía incómodo pero no podía hacer nada. La persona solo lo miró y le ordenó que trajera vino, nada más.
A las 8 en punto, Xie Xi fue al sexto puesto para entregar el vino y se congeló tan pronto como llegó.
El hombre en el medio de la sexta cabina también se sobresaltó.
Xie Xi rápidamente agachó la cabeza mientras sus manos comenzaban a sudar. ¡Era el nuevo profesor el que vino hoy, el Profesor Jiang!

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