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8 Dominios Colapsados (7)
La brillante luz del sol en él causó una capa de sudor delgado, pero en Xie
Xi, parecía darle una capa dorada de luz que hacía que la persona se viera
hermosa.
Jiang Xie lo miró y levantó la mano…
¿La piel de esta persona era caliente o ligeramente fría? ¿Sería el toque tan suave como parecía? ¿O sería como tofu tierno?
La boca de Jiang Xie estaba seca y la persona frente a él era como un oasis
en el desierto. Esta persona podría enfriarlo, calmar su sed y extinguir
el calor indescriptible en su corazón.
Tocó a Xie Xi suavemente en el dorso de su mano.
No era la primera vez que tocaba a Xie Xi. Había sostenido esta mano
innumerables veces en los últimos seis meses.
Nunca había sido así antes. Se sentía como si estuviera siendo
absorbido, como si hubiera innumerables hormigas pequeñas mordisqueando las puntas
de sus dedos y dejándolo…
¿Qué estaba haciendo?
Jiang Xie se retiró rápidamente con una cara pálida. Huyó de regreso a
la casa, apoyado contra la pared fría y respirando profundamente.
¿Acaso el periodo de celo era tan terrible?
¡Se volvió tan loco que consideró al hombre que lo adoptó como una
bestia! ¿Cómo podría ser esto?
Jiang Xie tomó un recipiente con agua fría y lo vertió sobre sí
mismo. El ardor de las yemas de sus dedos desapareció, pero el latido de
su corazón aún existía.
De repente recordó el ramo de flores y las palabras que los demás le
dijeron a Xie Xi. «Señor Xie, usted
también debería encontrar una compañera.»
Xie Xi declaró que tenía mala salud y no quería ser una carga para los
demás. ¿Significaba esto que se casaría si se recuperaba?
Eso era seguro. ¿Quién querría vivir solo por el resto de su vida?
Jiang Xie se dejó caer lentamente al suelo mientras sostenía su cabello
mojado con ambas manos.
No pienses en eso. Esperaría a que el cuerpo de Xie Xi
estuviera bien y también debería embarcarse en el camino de la
venganza. Sería bueno si hubiera alguien que acompañara a Xie Xi. Él,
estaría aliviado.
Se dijo esto a sí mismo, pero era como un cuchillo apuñalado en su corazón.
Jiang Xie se sentó por un largo tiempo antes de levantarse y cambiarse de
ropa.
Él se calmó. Justo ahora, estaba ocupado por los tontos deseos
fisiológicos y sus pensamientos eran un desastre.
No había nada en que pensar. Ignorando la profunda disputa de sangre,
¿qué podría hacer incluso si se quedara con Xie Xi?
Ambos eran varones.
Xie Xi lo salvó y lo trató como un hijo. ¿Cómo podía usar pensamientos
sucios para humillar a Xie Xi?
Jiang Xie suspiró suavemente y salió a llamar a Xie Xi.
Era bueno estar en el sol, pero había pasado mucho tiempo desde que esta
persona había comido.
“¿Señor?” Llamó a Xie Xi.
Xie Xi abrió los ojos, el par de ojos ligeramente en blanco eran como el
cristal negro que barría las estrellas en el cielo y golpeaba el corazón de
Jiang Xie.
Los pensamientos que Jiang Xie reprimió surgieron aún más bruscamente.
La voz de Xie Xi no sonaba feliz. “¿Cómo me quedé dormido?”
Se levantó y parecía que estaba mareado por estar a la luz del sol durante
mucho tiempo. Una vez que se levantó de la silla, su cuerpo tembló
ligeramente.
Jiang Xie se inclinó hacia adelante y ayudó a sostenerlo.
Xie Xi le sonrió. “Mírame, soy realmente inútil.”
La mano de Jiang Xie estaba en la cintura de esta persona. A través de
la ropa caliente del sol, parecía ser capaz de pellizcar esta delgada cintura…
“¿Pequeño Xie?”
Jiang Xie se despertó bruscamente. Su primer pensamiento fue apartar
la mano, pero Xie Xi se caería.
Su garganta se movió mientras miraba hacia abajo para ver los labios secos
de Xie Xi.
Xie Xi lo miró. “¿Mmm?”
Se sintió como si la pólvora destrozara el cuerpo de Jiang Xie. Seis o
siete almas volaron a la vez.
“Casa…” Él controló su voz. “Vuelve a la casa. La cena está
lista.”
Los ojos de Xie Xi brillaron mientras susurraba, “Siempre te estoy
molestando para que cocines.”
“Es solo cuestión de levantar las manos.”
“Si realmente soy tu padre, entonces soy demasiado incompetente.”
Las palabras despiadadas eran como un cuenco de agua fría que se vierte
sobre la cabeza de Jiang Xie.
Padre…
Mayor…
Hombre…
Jiang Xie sonrió de mala gana. “No digas eso. Me tratas muy bien. Hubiera
muerto sin ti.”
Xie Xi hizo una pausa antes de suspirar suavemente. “Eres un buen niño.”
Xie Xi solía decir estas palabras, especialmente durante la infancia de
Jiang Xie. A menudo persuadía a Jiang Xie así.
Anteriormente, Jiang Xie podría no sentirse más como un niño, pero le
encantaba escuchar estas palabras. Se sentía reconocido.
Ahora escuchó a Xie Xi decir eso y sintió que su corazón era apuñalado por
agujas.
Jiang Xie declaró, “Soy un adulto. No soy un niño.”
Xie Xi lo miró con un rastro de preocupación. “Sí, has crecido.”
Jiang Xie sabía que esta persona estaba preocupada por su matrimonio y su
corazón sufría aún más.
“Compré maíz dulce, lo partí y lo cociné en las gachas. Sabe
bien. Puedes entrar y comértelo.” Jiang Xie sabía que a Xie Xi le
gustaba comer maíz de afuera del pueblo porque era dulce, crujiente y jugoso.
Xie Xi estaba encantado. “Entonces debería darme prisa. No es
bueno comer si se enfría.”
Jiang Xie lo llevó adentro. “No hay prisa. Estoy usando el fuego
para mantenerlo caliente.”
Xie Xi habló de nuevo. “Eres realmente capaz.”
“Todo es trivial. No es nada.”
Xie Xi parecía querer decir algo pero se detuvo.
La papilla de maíz era dulce y deliciosa y Xie Xi comió más de medio tazón.
Jiang Xie temía que pudiera tener indigestión y ya no le dio más. “Si
quieres comer, te calentaré un tazón más tarde.”
Xie Xi tampoco se atrevió a comer más. Su cuerpo era demasiado enfermo
y la cantidad de ejercicio era seriamente inadecuada. Si comía un poco
más, sufriría por la noche.
Él respondió, “Las cosas buenas no se pueden terminar. Comamos de
nuevo mañana.”
Xie Xi comió una comida ligera mientras que Jiang Xie comió un gran pedazo
de carne cocida. Después de la transformación, ya no comía carne cruda,
sino una dieta equilibrada como los humanos.
Jiang Xie estaba cortando carne en el plato cuando de repente abrió la
boca. “¿Tienes algún plan para después de que tu cuerpo esté mejor?”
Xie Xi sonrió amargamente. “Mi cuerpo…”
A Jiang Xie no le gustaba escucharlo decir palabras tristes. “Ciertamente
se pondrá mejor.”
El tono de Xie Xi estaba lleno de indulgencia. “Sí, estará bien.”
“Entonces, ¿tienes algo que quieras hacer?”
Xie Xi miró a la otra persona y pronto volvió a abrir la boca. “¿Por
qué preguntas de repente sobre esto?”
La mano de Jiang Xie cortó la carne, su corazón voló a un lugar
desconocido. “Es muy afortunado que hayas atrapado el ramo de flores. Una
vez que tu cuerpo esté bien, puedes encontrar a una mujer…”
Las siguientes palabras fueron como un cuchillo en la garganta que no se
podía tragar.
Xie Xi no esperaba que dijera esto y se sorprendió un poco. “¿Quieres
que encuentre una compañera?”
El cuchillo en la mano de Jiang Xie cortó contra el plato. El sonido
del metal golpeando a la porcelana fue muy duro, especialmente en la cueva.
Jiang Xie dejó el cuchillo y dijo, “Mientras estés bien, hay muchas mujeres
dispuestas a casarse contigo.”
Xie Xi se sentó en la silla y observó en silencio a esta persona.
Jiang Xie parecía sentir que había visto a través de él completamente.
¡De ninguna manera, era
absolutamente imposible!
Jiang Xie apretó los puños debajo de la mesa mientras continuaba, “Eso es
normal. Casarse y tener hijos es algo que todos hacemos.”
Cuanto más hablaba, más quería encubrir lo que decía…
Xie Xi miró a esta persona profundamente. “Tienes la edad suficiente
para casarte.”
Jiang Xie le dijo, “No quiero casarme con nadie.”
“¿Por qué?”
Jiang Xie no le contó a la otra persona sobre la venganza, solo dijo, “No
hay una persona adecuada aquí.”
Xie Xi le preguntó, “¿Entonces quieres volver al País León para encontrar a
alguien?”
Jiang Xie fue claramente quien inició primero. Claramente le preguntó
a Xie Xi primero, pero en el momento en que escuchó la pregunta contundente de
Xie Xi, se formó un nudo en su corazón y quiso gritar de una manera injusta e
involuntaria: ¡No menciones el asunto de
casarse de nuevo! ¡Es muy bueno si continuamos así!
¿Cómo podía ser así?
No podía hacerlo aunque quisiera.
Jiang Xie respondió, “No quiero volver al País León.”
Xie Xi no habló.
Jiang Xie agregó, “Pero no me casaré con ningún tigre.”
Xie Xi respondió con un ligero cansancio, “Estoy cansado. Primero iré
a descansar.”
“Buenas noches.”
Xie Xi se levantó. “Buenas noches.”
Jiang Xie limpió los palillos y se quedó en la cocina para pensar.
No sabía lo que estaba mal consigo mismo. Tenía buena salud, no estaba
sujeto a ningún deseo y no sentía un calor incontrolable.
Lo más incómodo era el corazón en su pecho. No sabía cómo
describirlo. Era como si se despertara de un día para otro y no supiera
cuándo habían colocado a una persona en su corazón.
Esa noche, Jiang Xie tuvo un sueño.
En su sueño, estaba en un lugar completamente extraño. Parecía un
jardín con rosas floreciendo como una ola roja ondulante.
A lo lejos, había un pequeño pabellón hecho de un jade blanco
desconocido. Dentro había una mesa redonda con dos taburetes pequeños.
Había un hombre en el pabellón. En lugar de estar sentado en un
taburete pequeño, estaba apoyado contra el pabellón. Parecía estar mirando
algo de manera seria y centrada.
Jiang Xie se acercó paso a paso, su corazón latía rápidamente.
El hombre pareció sentirlo y giró la cabeza con una sonrisa. En un
instante, las rosas rojas se volvieron blancas y el mundo entero quedó
instantáneamente claro.
Jiang Xie sintió una ráfaga de viento que le abrió el corazón y le dio un
placer y una comodidad infinitos.
Se acercó y sin saber por qué abrazó a esta persona.
No solo el hombre no lo alejó, sino que el hombre envolvió sus brazos
alrededor de su cuello.
Jiang Xie inclinó la cabeza y cubrió sus labios, besando a esta persona de
cerca.
El hombre dijo, “N-No aquí.”
Jiang Xie no escuchó y lo presionó contra el pilar de jade blanco.
El hombre estaba un poco molesto pero su voz era dulce y seductora.
Jiang Xie quería besar a esta persona pero también quería escuchar su
voz. Por un tiempo, sintió que nada era suficiente.
La persona exclamó, “¡Suficiente!”
Jiang Xie lo mordió suavemente en el cuello. “No.”
El hombre lo miró con los ojos húmedos. “¡Jiang Xie!”
“Sí.”
“Estás casi…”
Jiang Xie abrió la boca. “Pequeño Xie, te extraño…”
De repente, Jiang Xie despertó del sueño. Se sentó mojado en sudor
frío, sus ojos llenos de miedo. El hombre en su sueño era Xie Xi, la
persona que le salvó la vida y lo crió.
Jiang Xie estaba delirando y en realidad tuvo esa clase de sueño. Él
era realmente… ¡un bastardo!
En la otra habitación, Xie Xi también se despertó de un sueño. ¿Cómo
volvió a soñar con la Central?
Xie Xi se frotó la sien y se levantó para beber agua. Se movió y
sintió que su cuerpo estaba un poco pegajoso.
Soñó con la Central y también estaba haciendo esas cosas Jiang
Xie. ¿Estaba un poco insatisfecho?
Era una pena que su amado estuviera cerca, pero su amado quería que se
casara con otra persona.
¡Xie Xi realmente quería levantar al pequeño león y sacudir el agua en su
cabeza, para que se ponga sobrio! Pero…
Xie Xi se cambió lentamente de ropa, pensando, No es de extrañar, Jiang Xie no expresó sus sentimientos, lo que me
hizo pensar en esto.
Aun así, ¿qué podría decir Xie Xi? Tenía este cuerpo roto y no podía
ayudar a Jiang Xie a pasar su celo.
Entonces Xie Xi tuvo una nueva preocupación. ¿Qué debería hacer con su ropa pegajosa?
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