Novela original por: Long Qi (龙柒)
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Maravillosa Pintura de Montañas y Mares (FIN)
Traducido por: Firu Firu
Esta fue la audaz idea de Xie Xi, pero sintió
que era correcto.
Escribió su nombre en la Sabiduría de Dios y
luego entró en la Sabiduría de Dios. Esto no debería generarse
automáticamente en el registro. Por lo tanto, aún no había completado la misión
y no abandonaría este cuasi-mundo.
Xie Xi abrió los ojos y se encontró durmiendo
en un mar de flores. Las flores daban vueltas a su alrededor. “Señor Flor
Dios, ¡está despierto!”
Xie Xi asintió y preguntó, “¿Qué hora es?”
Nadie respondió a su pregunta. Entonces
una pequeña flor gritó, “¡Lord Dragón Azur ha vuelto!”
Xie Xi giró la cabeza y vio a Dragón Azur
acercándose a través del mar de flores.
Los labios de Xie Xi se curvaron mientras
sonreía. Dragón Azur lo besó en la frente. “¿Qué está pasando?”
“¿Qué piensas?”
“¿Un nuevo mundo?”
Xie Xi no respondió. En cambio, tiró de Dragón
Azur por el cuello y lo besó en los labios.
Dragón Azur todavía tenía preguntas pero no
podía soportar el dulce beso. Simplemente se inclinó y le devolvió un beso
prolongado.
Las flores cubrieron sus ojos y zumbaron
tímidamente. Xie Xi recordó que había otros presentes y quería alejar a Dragón
Azur. Entonces Dragón Azur lo recogió y lo llevó de regreso a la casa.
Nadie más estaba presente y volvieron los ojos
de diferentes colores. Sin embargo, presionó a Xie Xi contra la cama y
continuó. Xie Xi estaba tratando de negarse, realmente lo intentó. Sin
embargo…
“¡Ah, ya está bien!”
Jiang Xie le dijo, “Me has seducido
así. ¿Cómo puedo no estar a la altura de tus expectativas?”
Xie Xi gritó, “¡No estamos aquí para estar solos!”
“Un hombre solitario hará estas cosas cuando
esté solo.”
¡Qué idea tan equivocada! La razón de Xie
Xi fue completamente arruinada por las manos que lo calentaron por todas
partes. Una vez que se apagó el fuego, Jiang Xie finalmente estuvo
dispuesto a hablar.
Xie Xi le dijo, “Estamos en la Sabiduría de
Dios.”
Jiang Xie replicó, “¿Estás seguro?”
“Por supuesto, sellé las almas en él.”
Los labios de Jiang Xie se curvaron. “Quiero
decir, ¿estás seguro de que esta es la Sabiduría de Dios?”
Xie Xi estaba aturdido. Jiang Xie agregó, “Esto
podría ser fuera de la Sabiduría de Dios.”
“Pero…” Los ojos de Xie Xi estaban muy
abiertos. “Claramente…” De repente se detuvo y no pudo decirlo.
Si poseía la Sabiduría de Dios, ¿significaba
que estaba fuera de la Sabiduría de Dios? ¿Debe estar en la Sabiduría de
Dios si entró en la Sabiduría de Dios?
Si pensaba en la Sabiduría de Dios como una
puerta que le permitía viajar de un lado a otro, ¿cómo podría distinguir entre
el interior y el exterior?
Jiang Xie abrió la boca. “No importa. Lo
importante es que estamos juntos.”
Conocía los pensamientos de Xie Xi y fue
endulzado por ellos. No importaba si estaban dentro o fuera de la Sabiduría
de Dios.
El Dios Flor dibujó la Montaña Sagrada y el Mar
Demoniaco, pero ¿realmente los dibujó?
Quizás cuando recogió el bolígrafo, entró en el
mundo de las flores del dibujo y se encontró con Dragón Azur, Tigre Blanco, Ave
Bermellón y Nueve Colas. Darles nombres y reconocer su existencia los sacaba
de la pintura. Aquellos “sellados” en la Sabiduría de Dios también podrían
salir de la pintura.
Por supuesto, esto era solo una
suposición. Era como Jiang Xie le dijo: no hay límites entre la realidad y
la falsedad.
Xie Xi todavía estaba pensando. “Entonces…
¿estamos en el mundo fuera de la pintura?”
“Es nuestro mundo.”
Investigar el interior y el exterior de la
pintura era como perseguir el pasado y el futuro. No tenía sentido. Era
porque no había pintura en absoluto. Solo había este momento.
Xie Xi sonrió y lo miró. “¿Qué tipo de misión
principal se habría lanzado si no hubiera sido yo quien ingresara a este
cuasi-mundo?”
Jiang Xie respondió, “Nada.”
Xie Xi sabía lo que quería decir y le dijo, “Adivina.”
“No puedo adivinar.” Jiang Xie picoteó a Xie Xi
en los labios. “Solo tú puedes entrar en mi mundo, así que no hay otra
posibilidad.”
De hecho, no importa cuál sea el corazón del
mundo, solo había un núcleo después de que Xie Xi entrara.
Y ese era Xie Xi.
Xie Xi sonrió y lo regañó. “Un cerebro enamorado.”
Sabía que los mundos realmente albergaban muchas de las ideas de Jiang
Xie. Tiempo no lineal, espacio superpuesto, lo llamado real e ilusorio…
Más importante aún, Xie Xi sintió la inquietud
y el anhelo de Jiang Xie. Casi estaba iluminando a Xie Xi, ayudándolo a
atravesar la puerta de un diseñador y tocando algunas de las cosas más básicas
pero al mismo tiempo esenciales.
La mente de Jiang Xie era obvia. Quería
estar con Xie Xi durante mucho tiempo, en lugar de pasar la noche.
Su voluntad afectó a las almas pero también al
mundo, convirtiendo a Xie Xi en el Dios Flor.
Xie Xi abrió la boca. “No queda mucho
tiempo. Duerme bien y yo iré al siguiente.”
Jiang Xie, “…”
Xie Xi sonrió. “Solo sostén la marioneta para
dormir. No pierdas el tiempo.”
El Viejo Jiang que no esperaba esto, “¡Quiero
abrazar a la persona real!”
“Es realmente bueno.”
Luego lanzó una marioneta y lo empujó a los
brazos de Jiang Xie.
Jiang Xie, “……”
La marioneta había sido montada por Xie
Xi. Su única función era dormir. Xie Xi había escrito muchas palabras
antes de entrar en la Sabiduría de Dios. Era maravilloso. No importa
el dibujo, el Dios Flor podría usar la pluma para dominar el mundo.
Xie Xi pensó en esto y su corazón era tan dulce
como la miel. Él era el Dios Flor y este mundo era Jiang Xie. Su
pluma dominaba el corazón de Jiang Xie.
Xie Xi primero fue a ver al Tigre Blanco. Consoló
al Tigre Blanco de mal genio antes de hacer que Jiang Xie sostuviera una
marioneta para dormir. Luego consoló a Ave Bermellón, seguido de Nueve
Colas y Houqing.
Esta era la mejor solución que Xie Xi pudo
pensar. Había cinco horas en este mundo.
Dragón Azur, Tigre Blanco, Ave Bermellón, Nueve
Colas y Houqing. La duración de una hora era de casi 24 horas en la
Tierra.
Representaban el cambio en el sol y la
luna. Cada vez que Dragón Azur despertaba, los otros cuatro dormían y así
sucesivamente. Nunca se encontrarían.
Esta fue la inspiración de Xie Xi al abrir este
mundo. Al igual que el sol y la luna, se alternarían y sostendrían al
mundo entero. Las almas fueron claramente ordenadas por él de esta manera.
Durante el día, se encontrarían con el
verdadero Xie Xi y por la noche, dormirían con la marioneta.
Después de dos rotaciones, Jiang Xie ordenó, “¡Volvamos
a la Central!”
Xie Xi bromeó, “¿No eres feliz? Hay cinco
de mí aquí.”
Estaba cuidando a Jiang Xie al no hacer seis.
Los dientes de Jiang Xie eran dolorosos. “Muy
feliz.”
Hacía felices a las almas y maltrataba a Jiang
Xie. Xie Xi tenía una gran sonrisa en su rostro cuando regresó al Mundo
Central.
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