lunes, 31 de mayo de 2021

Game Loading Cap 260

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Novela original por: Long Qi (龙柒)
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8 Dominios Colapsados (4)


Traducido por: Firu Firu

Xie Xi nunca se había transformado en una bestia, por lo que la gente no sabía qué forma tenía.

El pequeño león era tan pequeño y escuchaba obedientemente las palabras de Xie Xi. Por lo tanto, no había nada de malo en que los tigres pensaran que eran padre e hijo.

Se podía ver que los tigres no sabían mucho sobre Xie Xi. Probablemente solo pensaban que era un inválido que moriría en la cueva.

Xie Xi no negó este asunto.

La apariencia del pequeño león era extraña y explicar esto era muy problemático. Para evitar que los tigres piensen demasiado, Xie Xi recibió a regañadientes a este “hijo”.

El pequeño león pudo entender y enseñó los dientes, dando a entender, ‘¡Él no es mi padre!’

Xie Xi le golpeó la cabeza. “Tengo la intención de hacer que se transforme también.”

En el momento en que dijo esto, la madre de Huyi y Huer gritó con entusiasmo, “¡Este asunto debería ser entregado a mí! El señor Xie es el salvador de mi familia. ¡Haré todo lo posible para que se transforme!”

Xie Xi también estaba ansioso por esto. No sabía cómo transformar al pequeño león y era mejor que alguien lo ayudara.

La mujer que había hablado anteriormente agregó, “Madre de Huer, debes darte prisa. La hierba teñida de estrellas y el jugo de kuku deben estar frescos.”

La madre de Huer había criado dos hijos y tenía mucha experiencia. “Eso es seguro. ¡Iré al mercado mañana para comprar la hierba teñida de estrellas y el jugo de kuku! También está el fruto de la vid. El de mi patio trasero maduró. ¡Quería conservarlo para mi tercer hijo, pero lo usaré ahora!”

Se podía ver que la transformación de un niño era realizada por las mujeres. La discusión entre las madres presentes era muy candente.

Xie Xi también entendió en general.

La transformación requería de muchos materiales y la calidad de los materiales afectaba la tasa de éxito.

La madre de Huer pellizcó las gruesas patas del león. “No se lo puede retrasar por mucho tiempo. Si pasa demasiado tiempo, podría quedar discapacitado de por vida.”

Xie Xi no pudo evitar que su corazón se hundiera.

El líder de la familia, Wang Dahu, regañó a su esposa, “¿De qué estás hablando? ¡Estoy seguro de que será un éxito!”

La madre de Huer gritó apresuradamente, “¡Sí! ¡Este pequeño cachorro nació bien y seguramente será un niño grande y gordito!”

El corazón tenso de Xie Xi se relajó ligeramente debido a esta oración.

Un grande y gordito Malvado Jiang…

¡Era tan mágico!

La preocupación de la madre de Huer no era irrazonable. Los tigres y los leones eran similares y tenían que transformarse a temprana edad. Si fuese demasiado tarde, entonces sería difícil para ellos transformarse en forma humana.

En este mundo, los hombres bestia que no podían convertirse en humanos quedaban discapacitados permanentemente. Lo terrible era que sus mentes no se desarrollarían y se convertirían en una bestia con solo una naturaleza animal.

Hablando de eso, el ambicioso Wang Huyi suspiró. “Escuché que cuando el Rey Bestia estaba en el poder, las vides estaban en todas partes, había más hierbas teñidas de estrellas que las estrellas en el cielo y el jugo de Kuku podía acumularse en los ríos…”

Wang Dahu lo había presenciado personalmente y también dijo, “El Rey Bestia Rosa fue diligente en su trabajo y amaba a la gente. Prestó especial atención al desarrollo de los jóvenes. Incluso los niños desamparados podrían obtener la ayuda de personas de buen corazón y transformarse a tiempo.”

La madre de Huer dijo, “Sí, los materiales estaban en todas partes, a diferencia de ahora…”

Wang Dahu la miró y la madre de Huer se calló.

Xie Xi entendió el significado de la mirada de Wang Dahu. No quería que la madre de Huer hablara de la falta de materiales. Después de todo, pronto se prepararían para la transformación del león.

Wang Huer estaba lleno de anhelo. “El Rey Bestia Rosa fue realmente feroz. ¡Era el tigre blanco más poderoso del mundo! ¡Una vez rasgó la garganta del tirano del País Oso, hiriendo su vitalidad, por lo que estaba dispuesto a arrodillarse!

Los cachorros de tigre a su alrededor dijeron, “Fue aún más asombroso en la batalla contra el País Lobo. ¡Una persona luchó contra 10 lobos y ganó por completo!”

“¡El País Leopardo también! ¡Escuché que el rey leopardo no era comparable a su velocidad!”

Xie Xi estaba avergonzado por la jactancia de los cachorros.

Después de todo, era probable que él fuera el dominante Rey Bestias Rosa.

Wang Huyi suspiró, “Desafortunadamente, el rey bestia…”

La multitud suspiró y realmente extrañaban al héroe de la tribu tigre.

Las guerras y disputas actuales en las que ningún país se inclinaba ante otro significaban que todo tipo de demonios y monstruos estaban desenfrenados. Los que más sufrían eran las personas comunes.

Se podía ver por cómo los materiales que solían encontrarse en todas partes ahora eran una mercancía valiosa.

Este era un círculo vicioso. Los materiales eran limitados y había muchos cachorros que no podían transformarse.

Si los cachorros no podían transformarse, había una gran probabilidad de que se convirtieran en bestias asesinas.

Esto era realmente amargo para la gente de abajo…

Si no tuvieran hijos, perderían su fuerza laboral y la aldea se marchitaría gradualmente. Si tuvieran hijos y no pudieran comprar los materiales, tendrían la carga de una bestia asesina.

Tal círculo vicioso significaba que la sociedad estaba en desorden.

El fuerte contraste los hizo extrañar al rey bestia.

Se perdieron el gran reino unificado del que él estaba a cargo donde las bestias y las personas vivían y trabajaban en paz.

Cuanto más sabía Xie Xi sobre la dinastía Rosa, más dudas tenía. ¿Era difícil unificar a los ocho países?

Había otra sensación punzante en su pecho…

Rápidamente tomó un analgésico para aliviarlo.

Según sus palabras, la mitad de la razón de la unificación de los ocho países fue la fuerza del rey bestia.

Como la familia de los tigres todavía quería dar a luz a un tercer hijo, Xie Xi no quería ocupar todos sus materiales de transformación.

Pensó en ir al mercado para ver este tipo de materiales y luego dibujarlos. No era una cura, pero era mejor que nada.

Xie Xi le preguntó al pequeño león, “¿Quieres ir al mercado conmigo?”

El pequeño león gritó y tomó la iniciativa de llevar la canasta.

Xie Xi sonrió. “Eres tan poderoso. ¡Puedes llevar una cesta tan grande!”

El pequeño león resopló y levantó la cabeza.

Xie Xi tomó una botella de medicina física y apenas pudo llegar al mercado.

La madre de Huer dijo directamente, “Sr. Xie, puede descansar. Yo iré y volveré.”

Xie Xi sacudió la cabeza. “Llevaré al pequeño Xie a ver.”

Estaba hablando del Xie en nombre de Jiang Xie, pero todos pensaban que era el Xie en Xie Xi.

A esta aldea le gustaba usar el nombre del padre para nombrar al hijo. Por ejemplo, los hijos de Wang Dahu fueron llamados Wang Huyi y Wang Huer. Si Wang Huer no hubiera nacido, entonces Wang Huyi se llamaríaa Wang Xiaohu (Pequeño Tigre).

La madre de Wang Huer respondió. “Está bien, al cachorro le gusta ir al mercado. Si está de buen humor, las posibilidades de que la transformación tenga éxito serán mucho mayores.”

Xie Xi asintió con la cabeza.

De hecho, no había reglas detrás del éxito de la transformación. Todo se basaba en la suerte.

El éxito podría ahorrar mucho dinero, mientras que fallar más de tres veces probablemente significaría nunca transformarse. Por lo tanto, los hombres bestia estaban dispuestos a resumir una variedad de experiencias.

No importa la hora y el lugar, la gente estaba llena de cálculos.

El mercado estaba muy animado. Xie Xi miró a su alrededor y se sorprendió.

El trasfondo de este mundo era antiguo pero no era puramente antiguo. Había un cierto grado de avance tecnológico y algunas cosas misteriosas también. Era un escenario bastante mixto.

Sin embargo, este mercado era remoto y era probable que las grandes ciudades tuvieran escenas diferentes.

La madre de Huer estaba familiarizada con el camino y pronto compró materiales de transformación.

Para aumentar su experiencia, Xie Xi hizo muchas preguntas sobre los materiales.

El empleado de la tienda estaba muy molesto. “Señor, ¿qué quiere comprar?”

Xie Xi, “…” No podía costearse nada.

El dueño de la tienda no estaba dispuesto a esperarlo. “Entonces mire de nuevo y llámame.” Luego fue a otra persona.

Xie Xi no podía hacerlo solo. El lápiz de dibujo era equivalente a su corazón y tenía que entender las cosas para dibujarlas bien.

Aun así, no podía comer y convertirse en una persona gorda de una sola vez. Él miraría lentamente y recordaría muchas cosas hoy.

En el camino de regreso, la madre de Huer estaba avergonzada. “Solo hay suficiente para un intento…”

Xie Xi le dijo, “Eso es suficiente.”

La madre de Huer gritó, “Si eliges un buen momento, ¡el pequeño Xie definitivamente tendrá éxito de inmediato!”

Xie Xi asintió con la cabeza. “Sí.” Tocó la cabeza del pequeño león.

Teniendo en cuenta el cuerpo de Xie Xi, fueron al puesto de té a descansar antes de continuar su viaje.

El clima era cálido y algunas personas descansaban después de visitar el mercado. Xie Xi se sentó a un lado y escuchó muchos chismes.

“No creo que el Rey Bestia Rosa vuelva.”

“Realmente hizo demasiados enemigos mientras cumplía sus decretos.”

“Aun así, ¡lo hizo por el bien de nuestra gente!”

“¿Y qué se consiguió? ¡No pudimos protegerlo!”

“No entiendo por qué el maestro nacional traicionaría al rey bestia…”

“¿Quieres dejar de vivir?” El hombre cubrió la boca de la otra persona. “¡Serás decapitado si hablas del maestro nacional!”

El hombre resopló. “Podíamos decir lo que quisiéramos cuando el rey bestia todavía estaba aquí.”

“¡El rey bestia se ha ido!”

“El maestro nacional era la persona más confiable del rey. Cómo…”

“¡Cállate!”

El hombre ya no se atrevió a hablar. Xie Xi lo escuchó y estaba lleno de pensamientos.

¿Quién era el maestro nacional? Parecía ser una persona importante.

Xie Xi inexplicablemente se sintió un poco incómodo. Luego miró al pequeño león y su corazón volvió a estar firme. La identidad del maestro nacional no importaba. En cualquier caso, Jiang Xie estaba a su lado.

Ya era de noche cuando regresaron a la aldea.

La madre de Huer le dijo a Xie Xi, “Mañana al mediodía es el mejor momento. Debes asegurarte de animar al pequeño Xie. Si está de buen humor, la tasa de éxito de la transformación será mucho mayor.”

Xie Xi estaba familiarizado con este dicho y respondió, “Entiendo.”

“Esperaré tus buenas noticias.”

Xie Xi asintió con la cabeza.

La transformación era mejor en un ambiente familiar frente a la persona más tranquilizadora. Si el cachorro se relajaba física y mentalmente después de tomar los materiales, la tasa de éxito sería mucho mayor.

Estas eran las experiencias adquiridas a lo largo de los años y escucharlas no estaría mal.

Xie Xi no durmió bien y estaba muy nervioso.

Jiang Xie podría intentar la transformación como máximo tres veces. Si no tuviera éxito, entonces sería muy peligroso.

Era razonable decir que el alma debería ser capaz de transformarse en un humano, pero Xie Xi sabía sobre el desafortunado físico de Jiang Xie. Era realmente terrible

Todo estaba listo Xie Xi se aseguró de que el pequeño león tuviera suficiente para comer y beber antes de preguntarle, “¿Cómo te sientes?”

El pequeño león gritó en voz alta.

Él sonaba bien. Xie Xi le frotó la piel de la espalda y dijo, “Vamos, conviértete en un humano para que puedas hablar.”

El pequeño león estaba muy emocionado. Sus ojos dorados eran redondos y brillantes.

Xie Xi dio un suspiro de alivio y siguió los pasos para darle de comer los materiales.

Todos los materiales se manejaron bien y solo necesitaban que el cachorro…

Bang.

Xie Xi apretó los puños. ¿Tuvo éxito?

La niebla desapareció. Era un pequeño león o…

Xie Xi frunció el ceño. El primer intento había fallado.

El pequeño león se retorció mientras miraba sus patas antes de mirar a Xie Xi.

Xie Xi le dijo, “Está bien, tengo los materiales, intentemos de nuevo.”

El pequeño león se levantó y comió cuidadosamente los materiales.

Hubo una explosión de nuevo y el corazón de Xie Xi se tensó.

La niebla se despejó y nuevamente fue un fracaso.

El pequeño león vio su cuerpo y el brillo en sus ojos dorados se desvaneció.

Xie Xi gritó, “¡Inténtalo una vez más!” Afortunadamente, había dibujado suficientes materiales de antemano.

El pequeño león no estaba tan entusiasmado como la última vez. Miró los materiales y vaciló.

Había escuchado las palabras de la madre de Huer.

Su intento de transformación era demasiado tarde. Solo había tres posibilidades o si no él…

Entonces una mano delgada se acercó y le tocó la cara. “¿Tienes miedo?”

El pequeño león miró a los ojos claros y quedó atónito.

Xie Xi le aseguró, “No tengas miedo. No pasa nada.”

Un calor indescriptible fluyó a través de su sangre y el pequeño león experimentó una tranquilidad mental sin precedentes.

Levantó la cabeza y gritó.

El sonido era claro y fuerte, lleno de valentía y confianza.

Xie Xi sonrió y besó suavemente las cejas del león. “¡Vamos!”

Fue un beso en el pelo, pero el pequeño león sintió un toque indescriptible.

Era muy suave y había una buena fragancia, haciendo que la gente se sintiera cómoda.

El pequeño león se liberó por completo de los grilletes de su corazón y se comió los materiales.

No creía que no pudiera transformarse. ¡No creía que se perdería a si mismo incluso si perdía todo!

Hubo otra explosión.

Xie Xi no se atrevió a parpadear hasta que la niebla se dispersó. Vio a un pequeño Jiang Xie parado allí con orejas de bestia.

Cabello rubio y piel blanca como la nieve.

Los hermosos rasgos faciales en la edad adulta eran actualmente tan hermosos en la infancia.

Además, aún conservaba las patas y la cola de la linda bestia.

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